Que todos los hombres son “iguales”.

Estaban 4 mujeres platicando en un café, y si las hubieras observado de lejos te hubieran dado ganas de ir hasta su mesa, acercar una silla y entrar en la plática que tenían, y es que se reían con aquella fuerza y sus expresiones eran tales que hasta podías sentir que hablaban con todo su corazón, de las risas pasaban a esas caras de angustia y luego volvían a sonreír, dentro de sus frases se escucho claramente “TODOS LOS HOMBRES SON IGUALES”.

Chicas, la realidad es que ¡NO!, no todos son iguales, aunque no lo creas aun hay hombres caballerosos (aunque en especie de extinción) aun hay quienes te abren la puerta del carro, mantienen su mirada en tus ojos y no en otra parte, quien te regala flores sin una fecha en especial, quien te paga la cuenta, quien te ofrece su suéter en caso de que tengas frio, quien te besa en tu frente, quien te seca tus lagrimas, quien te abraza cuando ya no puedes mas, y lo más importante: que te regala chocolates en esos días difíciles. Y quizá te estás preguntando, ¿Dónde están?, ¡que no me ha tocado ni uno de esos! Me ha tocado escuchar a muchos amigos que dicen lo mismo: “¿Dónde están esas princesas?”, para tu desilusión no creo que estén todos en el mismo lugar, seas hombre o mujer (y mientras llega a tu corazón esa persona que te robe el aliento) procura no ser parte del montón. Me refiero a cuidar tu exterior, y tu interior, invierte este tiempo para amarte. Hombres si a ti no se te da el ser caballero no esperes una princesa, mujeres si no te amas a ti misma, como esperas que un hombre lo haga. Todo empieza en ti, cuando comienzas a valorarte ves las circunstancias diferentes.

Y aunque ya quedo claro que no todos son iguales, otra verdad es que MUCHOS suelen cometer los mismos errores, y es aquí cuando generalizamos. Pero mujeres no nos quedamos atrás, así como no todas somos iguales, también están las que cometen los mismos errores y la verdad es que también somos peligrosas, no culpemos de todo a estos “pobres” individuos.

Y por último, no pierdas la esperanza, quizá algún día cuando se abra la puerta de un elevador veas a ese hombre que te robará el suspiro, quizá no sea tan película de comedia-romántica, y descubras que todo el tiempo lo tuviste frente a ti. Puede ser que aun no lo conoces, y el también sueña con conocerte.

Puede ser que la mujer que te va a robar tus pensamientos, este del otro lado mundo, o del otro lado de la calle, puede ser que ahora tenga novio, pero tranquilo, si tú amas a Dios supongo que estás orando por ella, así que si ella es para ti, estarán juntos.

Y si aun eres soltero(a) mantente expectante, que emoción es saber que si has entregado a Dios el control de tus decisiones, El obrará a tu favor. Y sobre todo, sea cual sea tu situación, JAMÁS dejes de creer en el amor, porque al dejar de hacerlo, dejarás de creer en Dios, no olvides que ¡DIOS ES AMOR! Toma aire, respira, y sonríe, así como cambian las temporadas, así de un momento a otro cambia tu situación sentimental, y a veces parece que el invierno no termina, pero por supuesto que pasará y llegará la primavera. Una nueva temporada está delante de ti.

<< Todo tiene su momento oportuno; hay un tiempo para todo lo que se hace bajo el cielo. (Eclesiastés 3:1) >>