¡NO PODRAS!

Hace unos años escuché una historia que decía mas o menos así:

Unos amigos que eran apenas unos niños estaban patinando, en el lugar que ellos vivían cada año la laguna se convertía en una hermosa pista de hielo, todos los días iban a patinar. En una ocasión el hielo se rompió y un pequeño cayó al agua, el otro rápidamente fue por una piedra y empezó a golpear el hielo para romperlo, lo hizo con tanta fuerza que pudo salvar a su amigo, cuando los bomberos llegaron no entendían como un niño tan pequeño había logrado quebrar el hielo tan grueso, entonces alguien dijo: -este niño pudo hacer eso porque no hubo nadie que le dijera que no podía.

Hay personas expertas en dar para abajo a los sueños de otras, es tan fácil hacerlo, sólo se necesita decir frases como: No podrás, estás loco, eso no es para ti, se necesita mucho dinero, no tienes la capacidad, eso es imposible para alguien como tú, eres demasiado joven para lograrlo, no tienes lo que se necesita, no eres lo suficientemente inteligente, no naciste para eso.

Cuando se permite que esas palabras lleguen al corazón y a la mente ocurre casi de inmediato un bloqueo. Si pudiéramos ver el corazón de las personas y ver el número de sueños rotos que hay en cada una definitivamente nos darían ganas de llorar. ¡Si tan solo se hubiera atrevido a creer un poco mas en ella, si hubiera corrida una milla más, si no hubiera dejado que esas palabras entraran a su mente, si hubiera seguido luchando por sus sueños!

Dios ha puesto en ti sueños y anhelos, y te ha dado dones, talentos, capacidad, inteligencia para que los lleves a cabo. Basta cumplir un sueño que Dios puso en tu vida para saber que él no se equivoca. Y cuando la visión es de él la gloria también.

Si se han encargado de asesinar tus sueños, o quizá has sido tú el que se ha empeñado en hacerlo, hoy es una buena oportunidad de volver a soñar. No te quedes con el “hubiera”, vale la pena esforzarse por dar lo mejor de ti. Y cuando alguien venga contigo y te comparta un sueño no hagas lo que te han hecho a ti, mejor siembra palabras de fe, no sabes cuanto puede beneficiar ese sueño a tu comunidad.

Y lo bonito no es soñar, por que eso no cuesta nada y cualquiera lo hace. Lo bonito es luchar para que se hagan realidad. Los sueños solo son conquistados por hombres y mujeres valientes.

Este día mientras hables con Dios, deja que él te dirija y ponga en ti sus sueños, porque por más que tus sueños sean grandes, no se comparan a los sueños que han sido diseñados por Dios para tu vida. Siempre sin que te quede una duda, sus sueños para ti superarán los tuyos.

PD. Los sueños no son sólo para una determinada edad, mientras tú tengas aliento no dejes de soñar.

Pues Dios es quien produce en ustedes tanto el querer como el hacer para que se cumpla su buena voluntad. (Filipenses 2:13)