¡Los olvidadizos!

¿Te has dado cuenta que hay historias en la Biblia que son tan parecidas a lo que ahora vivimos? no importa la época, los humanos seguimos cayendo en los mismos pozos. Sería útil revisar la historia y empezar a cambiar patrones que llevaron a los pueblos a la destrucción y ruina total.

Dios hizo cosas asombrosas con el pueblo de Israel, y recibieron muchas promesas, las cuales creyeron y se cumplieron . Y como es más fácil recordar lo malo que vivimos que lo bueno, el pueblo olvido el favor recibido, cuando recibimos de parte de Dios cosas asombrosas y luego las olvidamos, y no solo las olvidamos sino que las rechazamos, desconfiamos y desobedecemos, llegan las enfermedades espirituales que dejan por consecuencia la muerte. Un pueblo que había sido lleno de bondad ahora estaba corrompido por olvidar de quién provenía su libertad ¿Te suena familiar?

¿Cómo podía el pueblo de Israel no darse cuenta que estaba cavando su propia tumba? Tan rebelde, tan mal agradecido, tan idolatra, tan llenos de sentimientos en contra del amor de Dios, tan conformistas, tan olvidadizos, tan injustos, tan ignorantes, tan culpables… tan parecidos a nosotros, tan parecidos a nuestros pueblos, tan similares a nuestra sociedad.

 ¿No éramos gente sin patria?¿No estábamos destinados a la esclavitud? Pero el amor triunfó. ¿Y que es el amor? ¿y como triunfó? Amor es Dios, porque Dios es amor(1 de Juan 4:8), amor es ser paciente en todo, y siempre amable, amor no conoce la envidia, no se cree más que nadie, amor no tiene nada que ver con orgullo, no es grosero ni egoísta, no se enoja por cualquier cosa, no se pasa la vida recordando lo malo que otros le han hecho, no aplaude a los malvados, sino a los que hablan con la verdad, todo lo aguanta, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta, vive para siempre(1 de Corintios 13:4-8) ¿Ya te diste cuenta? Amor es JESUS, 1 de Corintios 13 describe a Jesús, y cuando parecía que estaban haciendo pedazos al hijo de Dios, el silencio mismo pedía gritar: ESTO ES EL AMOR y no se dan cuenta. Pero TRIUNFO, el amor más puro, sin ningún interés personal derramado en una cruz, nos daba una ciudadanía celestial, nos regalaba la salvación, nos daba la libertad y la vida eterna. Nadie le quitó la vida, El la estaba entregando (Juan 10:18) Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. (Juan 3:16)

Y ese acto de amor que deberíamos recordar es olvidado por el patrón que seguimos repitiendo: Experimentamos milagros y creemos, pero olvidamos muy rápido, viene la angustia por causa del pecado, pedimos ayuda, Dios nos da su misericordia. Y ahí vamos de nuevo: experimentamos milagros y creemos, pero olvidamos muy rápido…

La historia ya cuenta como terminaron esos pueblos que se creyeron más inteligentes que Dios, pero en medio de cada historia Dios levantó hombres y mujeres que intercedieron a favor de su gente, no olvidemos lo que Dios ha hecho con nosotros, sólo de esa manera podremos hablar a los demás del amor que nos transformó, todo personaje que la Biblia relata que tuvo un encuentro con Jesús fue transformado (porque era y es imposible conectar con Jesús y seguir viviendo como antes lo hacíamos). Seamos de los que tomamos el compromiso de pedir a favor de los nuestros, de nuestra sociedad.

Y si te quieres olvidar de algo, olvídate de lo malo, de tu pasado que te atormenta, de lo que te roba la paz, pero no de lo que Dios ha hecho en ti y por ti.

Seguimos sin entender a donde nos lleva el olvidarnos de Dios…y entonces tristemente la historia se repite.