¿Te ha pasado que no sabes como reaccionar antes situaciones y quisieras saber que actitud tomar sin que se afecte tu relación con Dios?
PORFAVOR LEE ESTO:
«La conducta del creyente»
Deben mostrarse obedientes y sumisos ante los gobernantes y las autoridades. Siempre deben estar dispuestos a hacer lo bueno: a no hablar mal de nadie, sino a buscar la paz y ser respetuosos, demostrando plena humildad en su trato con todo el mundo.
En otro tiempo también nosotros éramos necios y desobedientes. Estábamos descarriados y éramos esclavos de todo género de pasiones y placeres. Vivíamos en la malicia y en la envidia. Éramos detestables y nos odiábamos unos a otros. Pero cuando se manifestaron la bondad y el amor de Dios nuestro Salvador, él nos salvó, no por nuestras propias obras de justicia sino por su misericordia. Nos salvó mediante el lavamiento de la regeneración y de la renovación por el Espíritu Santo, el cual fue derramado abundantemente sobre nosotros por medio de Jesucristo nuestro Salvador. Así lo hizo para que, justificados por su gracia, llegáramos a ser herederos que abrigan la esperanza de recibir la vida eterna. Este mensaje es digno de confianza, y quiero que lo recalques, para que los que han creído en Dios se empeñen en hacer buenas obras. Esto es excelente y provechoso para todos.
Evita las necias controversias y genealogías, las discusiones y peleas sobre la ley, porque carecen de provecho y de sentido. Al que cause divisiones, amonéstalo dos veces, y después evítalo. Puedes estar seguro de que tal individuo se condena a sí mismo por ser un perverso pecador.
¡Quisiera que cada palabra haya salido de mi, pero no! Esto no lo digo yo, lo dice la Biblia en TITO capitulo 3, no cabe duda que es la palabra de Dios la que ilumina nuestro camino. La próxima vez que no sepas como actuar lee tu Biblia. Cuando leas esto no lo apliques a otro, aplícalo a ti, seamos mejores cada día, Dios recompensará nuestra obediencia.