Antes que estar en un noviazgo, en un matrimonio, antes de tener una familia, un trabajo, antes de tener las responsabilidades que hoy tenemos, Dios ya nos había dado una encomienda muy importante para administrar: nuestro cuerpo. No es responsabilidad de nadie más que de nosotros.
La Biblia dice: ¿Acaso no saben que su cuerpo es templo del Espíritu Santo, quien está en ustedes y al que han recibido de parte de Dios? Ustedes no son sus propios dueños; fueron comprados por un precio. Por tanto, honren con su cuerpo a Dios. (1 Corintios 6:19-20 NVI)
Honrar con nuestro cuerpo a Dios, es parte de una serie de consejos que el apóstol Pablo escribió a los cristianos de la ciudad de Corintio, pero que puede aplicarse perfectamente a ti y a mi. ¿Qué es honrar con nuestro cuerpo a Dios? Lo vamos a analizar en 2 puntos:
1.Dejaremos en claro lo que NO honra a Dios
2.No podemos honrarlo físicamente si antes no tuvimos un cambio en nuestro interior.
1.LO QUE NO HONRA A DIOS
El mismo apóstol Pablo nos responde esta pregunta al hablarnos de los frutos de la carne y del Espíritu, al aconsejarnos que lo honremos no se refiere sólo a lo físico ni sólo a lo espiritual, sino a todo nuestro cuerpo.
¿Cómo no honramos nuestro cuerpo físicamente?
Cuando se sigue los deseos de la naturaleza pecaminosa: inmoralidad sexual, impureza, pasiones sensuales, idolatría, hechicería, hostilidad, peleas, celos, arrebatos de furia, ambición egoísta, discordias, divisiones, envidia, borracheras, fiestas desenfrenadas y otros pecados parecidos. (Gálatas 5:19-21 NTV)
Cualquiera que lleve esa clase de vida no heredará el reino de Dios, el vivir haciendo estás cosas deja consecuencias físicas, psicológicas, y daños en nuestro interior así como enfermedades, no sólo nos hace pedazos por dentro también nos aleja de una eternidad con Dios. Porque debes saber que cuando no agradas a Dios vas en contra de Él y por lo tanto te haces daño, te lleva a una condición física que no es saludable. No imiten las conductas ni las costumbres de este mundo, más bien dejen que Dios los transforme en personas nuevas al cambiarles la manera de pensar. Entonces aprenderán a conocer la voluntad de Dios para ustedes, la cual es buena, agradable y perfecta. (Romanos 12:2 NTV)
2.NO PUEDE HABER UN CAMBIO EXTERIOR SIN ANTES HABER UN CAMBIO INTERIOR.
Puedes anhelar un cambio en tu físico pero jamás lo lograrás si antes no cambias tu alimentación. Así también para honrar a Dios con nuestro cuerpo físico primero debemos honrarlo con nuestro interior, Dios quiere cosas buenas para nosotros, pero ¿cómo se nos revelarán si no cambiamos nuestra manera de pensar? Físicamente no fuimos diseñados para soportar el alcohol, el cigarro, las drogas, nuestro cuerpo fue diseñado para alimentarse de la manera en que la misma naturaleza proporciona el alimento.
Fuimos diseñados para funcionar como una gran empresa, si a tu cuerpo le das agua, si haces ejercicio, si llevas una alimentación saludable y balanceada, si evitas los excesos, si controlas tus ganas de comer chatarra, tu cuerpo responderá sin darte problemas, quizá no estas en ningún vicio o nada de inmoralidad sexual, pero aún en tu alimentación la pregunta es ¿crees que honras a Dios? Debemos ocuparnos en permitir que el Espíritu Santo cambie nuestra mentalidad, y nos permita llevar un estilo de vida en donde en cada área honremos a Dios.
Propongámonos este año tener la clase de fruto que el Espíritu produce en nuestra vida: amor, alegría, paz, paciencia, gentileza, bondad, fidelidad, humildad y control propio (Galanas 5:22NTV)No podemos decir que tenemos amor cuando ni siquiera nos cuidamos a nosotros mismos, si nos amamos tendremos una buena administración en lo que comemos, en nuestros hábitos y en nuestra actividad física, necesitamos paciencia para perseverar en este estilo de vida saludable, y mucho control propio.
¿Te fijas como necesitamos el fruto del Espíritu en nuestra vida para honrar a Dios con nuestro cuerpo físico e interior? No solamente honramos a Dios asistiendo a una Iglesia, sino teniendo cuidado de la administración que le damos a nuestro cuerpo, esto que comparto contigo no es vanidad es amor propio. La gente que te rodea y te ama desean que vivas más saludable en todo, y esto no es un principio de la época, es un sentir que Dios trata en su palabra.
Te dejo estos links que me agradan y te paso al costo, si quieres cambiar hábitos y tu estilo de vida desde tu manera de pensar hasta tu manera de hacer.
Para que un verdadero cambie suceda, te recomiendo un plan de LECTURA BIBLICA todos los días:
http://nuestropandiario.org/category/devocionales/nuestro-pan-diario/
Si quieres empezar una RUTINA DE EJERCICIO te recomiendo: Gym virtual
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Si te interesa un DETOX te recomiendo: Rawvana, tiene jugos muy buenos
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Sobre cada meta propuesta para este nuevo año, que tu prioridad sea honrar a Dios, verás como sales bendecido y no lastimado.
Jay Orozco 