Lo mejor está por venir

¿Estás en un momento oscuro de tu vida? Piensas ¿Hasta cuando se terminará este proceso? Esos mismos pensamientos probablemente eran los que pasaban por la mente de los discípulos cuando crucificaron a Jesús y estaba en la tumba.

Recientemente escuché una predica del Pastor Andrés Spyker, donde el preguntaba a la congregación:- ¿Qué pasó después de la crucifixión de Jesús? y la gente respondió: –¡resucitó!, y a continuación sus palabras me dejaron pensando, explicó como es que nos brincamos la etapa de la tumba, después de la muerte vino la tumba, luego la resurrección. Era necesario que Jesús limpiara lo que el hombre había ensuciado con su pecado, y así como fue necesario en aquella ocasión el luto, en nuestra vida también es necesario para experimentar una resurrección. Mencionaba que para que lo bueno pueda comenzar lo malo tiene que terminar .Lo maravilloso de vivir con Jesús es que con él siempre hay esperanza.

Los últimos actos de Jesús preparaban todo para su muerte, los discípulos no comprendían lo que sucedería en esa cruz, menos el desenlace que tendría.

Jesús ya sabe el desenlace que tendrá este momento que atraviesas donde parece que sigues en la tumba, donde no ves la luz, donde estas muy lastimado o incluso te sientes aplastado. Lo increíble de estar con Jesús es que así como hace más de 2 mil años triunfó, y demostró quien tiene el poder, dándonos esperanza de una mejor vida, de la misma manera hoy sigue dándonos esperanza. El momento de la tumba era tan necesario como el momento de la resurrección, en nuestra vida pasa lo mismo, no nos podemos brincar etapas sólo por querer “renunciar” al dolor, con esto no quiero decir que debes sufrir a fuerzas, sólo digo que es el duelo donde creces, en medio del dolor y el sufrimiento Jesús arregla los desgarres de tu alma, pero ¿Cómo puede ser que el dolor sea usado para sanar?

A nuestra percepción eso parece ilógico, pero es en ese momento cuando más dependientes de Dios nos volvemos y más libertad de que trabaje en nosotros le damos, si el jarro de barro tuviera vida y hablara, seguramente no pediría que el alfarero lo rompiera si está quedando chueco, el dolor debe ser muy grande, pero que alegría verse a un espejo y saber que romperlo fue lo mejor y que valió la pena.

Mientras Jesús estaba en la tumba y los discípulos hechos pedazos y muertos de miedo, no me imagino a Juan diciéndoles a los demás: “amigos lo mejor está por venir”, seguramente ese no sería un comentario atinado dadas las circunstancias.

Quizá no concibes este mismo comentario en tu vida ahora, pero si CREES que Jesús resucitó de los muertos, entonces crees en un Dios vivo, que da lo mejor aún cuando pareciera que nada bueno puede suceder.

Nuestro Dios es sorprendente, tu expectativa (tu fe) en lo que hará en tu vida no debe disminuir al contrario, que cada día aumente y se fortalezca sabiendo que Dios te capacita para las mejores cosas, que alegría es que Dios cambia nuestro luto por gozo.

Me encanta la canción que dice: ¡En la tumba de mahoma están los huesos de mahoma, en la tumba de buda, están los huesos de buda, no hay ídolo que haya resucitado todavía, solo Cristo al tercer día dejó la tumba vacía!

Y habiendo cumplido todas las cosas que de él estaban escritas, quitándolo del madero, lo pusieron en el sepulcro.Mas Dios le levantó de los muertos. (Hechos 13:29-30)

Jesús no nos deja sin esperanza, nos la dio cuando resucitó y nos la da cada vez que confiamos en él. Alégrate por que sin duda lo creo: LO MEJOR ESTA POR VENIR.

 

Si tienes oportunidad escucha esta canción: