NOVELA YO CONTIGO

El libro

CAPITULO 6.

“Para la mujer más hermosa, de la persona que más te ama”…

¿Qué es el tiempo? Es ese momento relativo que para unos dura poco y para otros no termina. Así se siente el tiempo a tu lado, que no pasa, que se detiene en un una sonrisa que dura para siempre. Yo supe que eras tú desde el primer día que te conocí.

Recuerdo perfectamente la primera vez que caminamos a tu casa, el cielo nos regalaba un azul bastante tierno, el sol al salir de la escuela era intenso, tu usabas mi sudadera alrededor de tu cintura ¡Que bueno fue que tu menstruación se haya atravesado! 

Ya en serio, agradezco infinito que te hayas manchado y que mi sudadera haya servido para comenzar a conocerte, soy tan afortunado. Parece ser que un ángel te cuida muy bien. Se encargó de ponerte en un salón de clases con el hombre más caballero del mundo. ¡Niégalo!

 Decidí comenzar a escribir para ti cuando te escuché contar como nos conocimos, omitiste muchas cosas y no me diste tanto crédito jaja. Cuando lo estés leyendo no llores Xime, en verdad arrugas la frente medio extraña y no quiero que piensen que estás leyendo un testamento donde no te han dejado nada. No tiene por que ser triste recordar, al contrario puede ser bueno.

Comenzaré con nuestro viaje a la playa, el que te enfermaste de la panza ¿te acuerdas?

 Perdón el que se enfermó fui yo, ¡uff por poco cambia la historia! Tu fuiste toda linda, querías ser muy ruda pero veía tu mirada de preocupación.

 De ese viaje aprendí que:

-No debo comer como bestia (al menos no de viaje), que debo ir al baño en la gasolinera y me detendré aquí por si lo llega a leer tu mamá que vergüenza, parecía interminable el viaje, o quizá a mi me parecía así por mi situación, pero al final llegamos, y fui el más feliz de estar en una casa con baño y claro en la playa, por supuesto contigo y mis papás. La casa que rentamos estaba de lujo ¿verdad?

 Recuerdo que las noches eran interminables mientras hablábamos con mis papás, yo creo que ahí fue donde te empezaron a querer como hija, ni yo te quería tanto en esa época, pero mi mamá se identificaba contigo ¿te acuerdas?

De ese viaje no olvidaré que: 

-Los abrazos se disfrutan

 No se de que hablaste con mi mamá pero ella te abrazo y tu te encogiste, fue como si eras parte de ella. Y me da tanto gusto, mi madre siempre quiso otro hijo, pero no pasó. No pasó cuando ella quería y como ella lo imaginaba, pasó cuando te conoció.

 ¡Que raro no! A veces las cosas no salen como las planeamos, pero al final salen.

 Moraleja: No se si en este momento de tu vida necesitas comprender que tus tiempos, mis tiempos, y los de Dios son diferentes, pero quédate tranquila Ximena, el tiempo es relativo, no te desesperes, al final del viaje llegas a casa, a una casa que supera tus expectativas.

 Espero que te haya gustado, por que esto apenas comienza…

Continúa leyendo, capítulo siguiente: https://jayorozco.com/2017/06/19/2752/

Deja tu comentario

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s