Mi embarazo

Dios hizo todo hermoso en su momento, y puso en la mente humana el sentido del tiempo, aun cuando el hombre no alcanza a comprender la obra que Dios realiza de principio a fin.(Eclesiastés 3:11 NVI)

Me alegra mucho poder compartir algunos datos curiosos de mi embarazo con ustedes, así que aquí comenzamos.

¿Cuál fue mi reacción al enterarme que estaba embarazada?…

Mis períodos menstruales siempre fueron exactos, a finales de Diciembre que no llegó, sospeché… pero había incredulidad en mi corazón, pensaba: ¡por años diciéndome que no sería fácil embarazarme y ahora resulta que ya pasó, no no puedo creerlo! Me hice una prueba a principios de Enero, estaba sola en casa, me gusta el silencio, mientras esperaba la respuesta leía, y entonces fui al baño y SUPER POSITIVO, pasé saliva, solo quede como en shock, y así en estado irreal como flotando estuve todo el día hasta que llegó mi esposo, le di la noticia y ahí lloré con mucha ilusión.

Mis primeros meses…

Seguía sin creerlo, tenía cólicos como que me iba a bajar y eso me daba miedo, me dejaron en reposo relativo y me entro temor, cuando me bañaba pensaba “hay un bebé aquí”, se me hacía loco. No vomité excepto como 3 veces, no tenía nauseas matutinas, más bien me daban después de desayunar y todo el día por unas pastillas que me sabían a pescado(Omega 3), cuando me las cambiaron mejoró completamente. Mi espalda resintió un poco y me dolían mis piernas, pero puedo decirte que tuve meses buenos.

Me pegó más lo emocional, en el sentido que apenas estaba iniciando el matrimonio, que mi familia estaba lejos, que me estaba acoplando a otra rutina, pero con la ayuda de Dios, de mi esposo, de mi Iglesia, de mis padres y amigos, esas rachitas de sombra las superaba, me llegaron durante días en algunos meses, no se si  las embarazadas que comparten estar lejos de casa o que se embarazaron muy rápido les pasó, pero si a ti te llega a pasar, puedo decirte que todo se va a ir acomodando, se paciente.

Siempre fui una admiradora del embarazo, de como Dios forma vida, de chica jugaba metiéndome suéteres a la panza y simulaba estar  embarazada, en verdad era un sueño para mí, que por un momento vi tan lejano, que me sentí tan incapaz, que pensé que nunca experimentaría ese milagro, y de repente salir embarazada sin problema me hizo recordar que mis temores habían crecido por palabras de hombre, nunca por palabras de Dios. En sus planes ya estaba que yo fuera mamá, y en mi había el deseo, me lo concedió como un regalo que no esperaba, como todo lo que viene de Él, como su gracia, como su misericordia, como su perdón.

Estos últimos meses…

He disfrutado que se me botara la barriga, de repente puedo ver como se mueve, mi ombligo se salió, y recientemente experimenté algo que me asustó mucho (como toda primeriza asustada), estaba en casa, iba bajando las escaleras y de repente ya no pude caminar, me esforcé mucho para llegar a la sala, y para no hacer esto muy largo, lo resumo así: durante tres días no pude caminar, no podía estar acostada, levantarme de estar sentada era mucho dolor y sentarme también, fui a urgencias, y bebé nadando feliz, él no era el problema, el primer día por el dolor de no poder moverme, no tomé agua, así que me deshidrate, tuvieron que ponerme dos litros y medio de suero, no podía bañarme, enderezarme, ni llorar(todo me dolía), al tercer día que no mejoraba, volví al doctor, solo dijo que el bebé estaba bien, que quizá un ligamento se estaba estirando. Mi mamá investigó y resulta que llego a la conclusión que el bebé estaba encajado.

¿Encajado? ¿qué es eso? Pues que se acomodó de una manera que me lastimaba y me privaba de caminar, ¿puede mi hijo hacer eso? ¡me dio risa! La solución fue, darme masaje e incomodarlo para que se moviera ¿puedes creerlo? Y en efecto así pasó, de la nada se salió de donde andaba y se acabó el dolor.

Esta semana cumplo 34 semanas…

Me cuesta dormir, a veces caminar (por que lo siento muy abajo) pero sueño con él, lo amo, deseo abrazarlo con todas mis fuerzas, no me imagino como me cambiará la vida, solo se que pasará. Me dieron 4 consejos en mi baby shower que súper breve te los paso si estás embarazada: 1. Disfruta este momento, 2.No te olvides de ti (ni de tu esposo, son una sola carne) 3. Disciplina a tu hijo, 4.Enseña a tu hijo a disfrutar de la presencia de Dios, pues ahí esta la plenitud.

Por ahora solo puedo cumplir el uno “disfrutar el momento”, y es que incluso es bíblico, (Eclesiastés 3) hay un tiempo para todo. Así que en eso ando, se que llegará el día del parto y eso por ser nuevo claro que me intriga, pero ¿de qué sirve? Es mejor confiar en que si Dios me mando un hijo es por que me capacitará, y si ya esta ahí de alguna manera tendrá que salir y mientras se siga cocinando, a seguir disfrutándolo.

Si ya eres mamá entenderás mi ilusión y ganas de conocerlo, por eso es el reto de disfrutar mi barriga antes de que se vaya, si aún no lo eres disfruta también tu temporada y ¡por favor duerme boca abajo mientras nada te de patadas!

Con mucho cariño te comparto algunas fotos de la sesión, que disfrutamos y amamos. (Más fotos en mi Instagram @jay0rozco)