Inspiracional

¿Cómo cambio mi forma de hablar?

“No voy a poder” y en consecuencia: no puedes.

“Me voy a enfermar” y te enfermas.

“Esto no va a funcionar”

Y una larga lista….

Lo que hablas, ENGRANDECES.

¿Qué estás magnificando? ¿Situación actual? ¿Enfermedad? ¿Crisis económica/matrimonial/relacional?

¿O a Dios? ¿Quién es más GRANDE en tu vida?

Lucas 6:45 NTV. Una persona buena produce cosas buenas del tesoro de su buen corazón, y una persona mala produce cosas malas del tesoro de su mal corazón. Lo que uno dice brota de lo que hay en el corazón.

En otras versiones “de la abundancia del corazón habla la boca”

Los pensamientos que me permito, se cultivan hasta que dan un fruto en mis palabras. Cuando continuamente estamos podando ese árbol, crece y crece, y lejos de pararlo se vuele más grande.

Eso no es igual a que no puedas expresarte para sanar. Sanidad requiere exposición de la herida, con los profesionistas indicados y un proceso de la mano de Dios, cada palabra que sueltes será pasado y entre más lejos lo veas, menos tendrás la necesidad de mencionarlo.

Mantenerte consciente que en tu boca hay poder de vida y muerte, te ayudará a no darle más poder a un momento que a lo eterno.

Mientras sigas hablando del ex, del pasado, de las culpas, de los hubiera, de lo mala que es tu relación (con tus padres, con tu jefe, con tus hermanos, con tu espos@, novi@).

Mientras sigas hablando de que no te “sientes” bonita, capaz, inteligente, verás como sigues esclavo, verás cómo estás lejos de la libertad, la misma libertad que quieres para expresarte es la misma que comprometes cuando te aferras a lo que no merece ser engrandecido.

Por eso el consejo no pedido de hoy: Engrandece sus PROMESAS, engrandece las grandes pero también las pequeñas victorias, engrandece sus milagros, engrandece paz, amor, alegria, dominio propio.

No es tu enfermedad, ni tu mala suerte, ni tu castigo, no te apropies de aquello que te roba.

¿Se trata de negar la realidad? No!

Se trata de que aún cuando reconocemos el momento sabemos que no será para siempre! Sabemos que tenemos esperanza! Sabemos que la voluntad de Dios es buena, agradable y perfecta!

(Romanos 12:2)

Puntos prácticos:

•Cuida tus pensamientos (ahí inicia todo) elimina y se tajante con lo que disminuye tu fe.

•Si ya no detuviste el pensamiento,deten tu lengua.

•Si ya no detuviste tus palabras, cambia la forma de hablar.

Ejemplo:

“Mi ex me rompió el corazón, me engañó, me dijo..me hizo sentir…”

-Si todo el tiempo estás repitiendo esto, puedes cambiar tus palabras a-

Tuve una relación tóxica, pero estoy trabajando para sanar.

Cada vez que se presente la oportunidad de hablar de la relación que no funcionó, practica cuidar tu corazón no volviendo a repetir recuerdos que te dañan.

•Inicia devocionales que hablen del poder del Espíritu Santo. Baja la app de “YOUVERSION” y busca el tema que desees.

Y por último, continuamente me doy cuenta que estoy engrandeciendo lo que no quiero así que continuamente estoy pidiendo ayuda a Dios. No creas que porque lo sabes lo practicas, pero el Espíritu Santo, nos ayuda en nuestra debilidad (Romanos 8:26)

Si por años has dejado que tu corazón(mente, emociones, voluntad) te dominen sin límites,se paciente. Comienza de a poco, se intencional en tus palabras, y te darás cuenta cómo parece que te quitan un peso de encima.

Sin duda las palabras pesan, pero también alivian.

Proverbios 16:24 NTV. Las palabras amables son como la miel: dulces al alma y saludables para el cuerpo.

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2 respuestas a “¿Cómo cambio mi forma de hablar?

  1. MUY INTERESANTE, MUY BUENA ENTRADA, EN PROVERBIOS 18:21 NOS ENSEÑAN QUE LA VIDA Y LA MUERTE DEPENDE DE NUESTRA FORMA DE HABLAR, Y CONSECUENCIAS HAY PARA AQUELLOS QUE NO MIDEN SUS PALABRAS. UNABRAZO

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